Takeo Gouda es un estudiante de primer año de bachillerato, pero no es el estudiante típico que solemos ver en mangas shojo. A saber: pesa 120 kg y mide 2 metros de altura (!!!). Quien sí parece el típico prota de mangas shojo es el amigo de la infanciua de Takeo: Sunagawa, que es tan guaperas como insensible respecto a todas las chicas que están a sus pies. Los días transcurren plácidamente hasta que de repente, una mañana, en su viaje cotidiano en tren hacia el instituto, Takeo salva a una chica llamada Yamato de ser abusada por un pervertido. ¿Será éste el inicio de la primavera del amor para Takeo?

La chica del parche en ojo, Midari Ikishima. Lo que ella desea es experimentar un riesgo de vértigo. Se niega a tener una existencia aburrida y anhela sentir un dolor punzante. Hoy, como siempre, deambula por esta Academia demente. No es decente, no está cuerda. Esta es la historia de una chica famélica y el juego.

Información de la editorial: Kiyoshi Fujino y cuatro amigos son los únicos estudiantes varones entre más de 1.000 mujeres de un instituto hasta hace poco sólo femenino. Insti regido por leyes y reglamentos draconianos, que penalizan hasta la falta más insignificante y suponen acabar en la cárcel (sí, el instituto tiene una cárcel dentro).

Texto de contracubierta: ¿Quién mató a la madre de los gemelos? ¡El asunto está cada vez más cerca de resolverse!
Migi y Dali, que consiguen escapar a duras penas de la mansión de los Ichijo, vuelven a su casa.
Dali cree que Eiji tiene la clave para aclarar el asesinato de su madre, por lo que decide acercarse a él transformándose en la preciosa Sally. Sin embargo, cuando parecía que su plan había sido un éxito, aparece Migi…