Está el mundo de los druidas llegando a su fin? La irrupción de la religión cristiana en Bretaña ha ido arrinconando cada vez más a los seguidores de las religiones del bosque, pero cuando un herrero muere asesinado de una forma terrorífica, las autoridades romanas no tendrán más remedio que acuidr al druida Gwenc hlan y a su ayudante Taran para resolver el misterio. Jean-Luc Istin y Jacques Lamontagne cierran con este ciclo su colaboración en la serie Los druidas, con una historia que explora las repercusiones de la convivencia de religiones en el albor de la Edad Media.

“La velada fue bastante alegre. Lizi, mi hermana mayor, dirigió las operaciones de un hombre de hierro, el abuelo gimió y Fann llenó la casa con su risa. Un circo que había durado tres años, desde la muerte. padres, y no lo estábamos haciendo tan mal ". Huyendo de la venganza de un maestro del Talion, la familia de Torun se ha exiliado al otro lado del mundo. El joven enano se encuentra sin un mentor que le enseñe el arte de la herrería. El cura del pueblo propone tomarlo como discípulo para que pueda sucederlo. Muerte en el alma, está a punto de aceptar cuando su camino se cruza con el de un ermitaño medio loco, un enano que vive como un animal en las profundidades del bosque …

Roma, año 695 Ab Urbe Condita. La ciudad está dominada por el primer triunvirato formado por Craso, Pompeyo y Julio César, pero este último ha ideado un plan para engrandecer la gloria de Roma…y hacerse con todo el poder.
Ámbar, una esclava de origen celta, descrubre los planes de César y empieza una terrible odisea para volver a casa, a las Galias, y advertir a su pueblo del peligro que se cierne sobre sus cabezas.

¿Quién, amante de las novelas detectivescas y de Sherlock Holmes, no ha oído hablar nunca de “Los Irregulares”? Bajo este nombre conocimos, de la mano de Sir Arthur Conan Doyle, a un variopinto grupo de chavales huérfanos y sin techo que vagaban por el peligroso barrio de East End y ayudaban al detective más famoso de todos los tiempos en sus pesquisas. Ellos eran los ojos y oídos de Holmes en la ciudad; aunque, a veces, estos Irregulares debían resolver por su cuenta algunos casos que Sherlock no podía atender por encontrarse ausente o inmerso en otra investigación.

París, 1900. Atrapado en un juego de muerte y frivolidad, Victor decide viajar a París, sumergida en la modernidad de la Exposición Universal para rendir cuentas con Alec, su creador, el aristócrata que lo ha convertido en una obra de arte viviente y descubrir si realmente él es el asesino que la sociedad merece.

"Las profecías dicen que Elric, el emperador albino, traerá la desgracia a la isla de Melniboné en la que gobierna. Cuando Yyrkoon, el primo de Elric y heredero al trono, decide tenderle una trampa para hacerse con el Imperio, desencadena una serie de acontecimientos que pondrán en peligro el equilibrio entre el Orden y el Caos en todo el Multiverso.

La investigación para descubrir al asesino de monjes en tierras bretonas continúa, mientras el choque de culturas entre la religión druídica, que venera a los dioses del bosque y la naturaleza, y la cristiana, que adora al dios venido del desierto, llega a un punto sin retorno, del que tal vez ni siquiera Gwenc’hlan, uno de los últimos druidas del mundo, pueda salir con vida.

Durante una tarde de borrachera, dos ricos aristócratas hacen una apuesta: modelar, como si de una obra de arte viviente se tratase, a un joven inocente y convertirlo en un criminal, en el asesino que la sociedad se merece. Su víctima: un muchacho ingenuo llamado Victor que descubrirá el mundo del placer y de la lujuria de la mano de la hermosa prostituta Mathilde, a sueldo de esos nobles.

De la antigua Grecia nos llega una de las leyendas más fascinantes de la mitología: ¡la historia de Atalanta! Abandonada al nacer por su padre y condenada a vivir sin amor por la diosa Hera, Atalanta fue adoptada por los habitantes del bosque sagrado y criada entre un grupo de cazadores humanos, hasta que se une al príncipe Jasón y sus argonautas para ir en busca del mítico vellocino de oro.

En el siglo V, el mundo está cambiando y empieza un conflicto entre el cristianismo y las antiguas religiones druídicas en la isla de Bretaña. Tras la muerte y la mutilación de algunos monjes, el druida Gwenc’hlan y Taran, su aprendiz, se enfrentarán a una amenaza tenebrosa para esclarecer el misterio de estos asesinatos y devolver la paz a ambas religiones.

¿Quién, amante de las novelas detectivescas y de Sherlock Holmes, no ha oído hablar nunca de “Los Irregulares”? Bajo este nombre conocimos, de la mano de Sir Arthur Conan Doyle, a un variopinto grupo de chavales huérfanos y sin techo que vagaban por el peligroso barrio de East End y ayudaban al detective más famoso de todos los tiempos en sus pesquisas. Ellos eran los ojos y oídos de Holmes en la ciudad; aunque, a veces, estos Irregulares debían resolver por su cuenta algunos casos que Sherlock no podía atender por encontrarse ausente o inmerso en otra investigación.